4. Factor forma (tamaño)

El tamaño 

Uno de los primeros aspectos en los que te tienes que fijar a la hora de comprar una placa base son las dimensiones. Existen diversos tamaños, y en función del tipo de ordenador que necesites, será más adecuado un factor de forma de tamaño completo (ATX), de tamaño medio (micro ATX) o un tamaño reducido (mini ITX). Esta decisión también deberás tenerla en cuenta a la hora de elegir otros componentes como la caja para tu PC o la memoria RAM.

Las placas base de formato ATX, al disponer de más superficie para la circuitería integrada, cuentan con un mayor número de ranuras y conectores de expansión para los componentes. Por pura disponibilidad física de espacio, cuanto menor sea el tamaño de la placa base, menos conectores y posibilidades de expansión tendrá.

 

El factor de forma de la placa base afecta al número de conexiones.

Además, el formato de la placa base determinará el tamaño de la caja para tu PC y, por tanto, también podrá afectar a la elección de sus sistemas de refrigeración.

Por ejemplo, en el caso de las placas base de tamaño mini ITX, el reducido espacio disponible en las cajas adecuadas para su tamaño, obliga al uso de soluciones de refrigeración de perfiles bajos, disipación pasiva e incluso a sistemas híbridos.